NO MUERDEN

 


EL SHOW, ¿DEBE CONTINUAR?

Amir Nasr-Azadani es un joven futbolista iraní que fue condenado a muerte en su país.

 El ex jugador del Rah-Ahan, el Tractor y el Gol-e Rayhan, de 26 años, fue acusado por el régimen iraní de un delito llamado ‘moharebeh’, es decir, ‘enemistad con Dios’, según ‘IranWire’;

En la plataforma internacional www.change.org  se acumulan cada día más firmas para frenar la ejecución de Amir Nasr-Azadani

¿Alcanzará?

No es el único pedido:  se sumó al rechazo la Federación Internacional de Asociaciones de Futbolistas Profesionales (FIFPRO), que pidió a las autoridades iraníes que eliminen la pena.

¿Alcanzará?

De concretarse el asesinato de Amir será el tercer ahorcado en público tras ser condenado por protestar por el asesinato de Mahsa Amini. El último jueves, Mohsen Shekari, un joven de 23 años, perdió la vida tras ser condenado a la orca en público por atacar y herir a un paramilitar durante las movilizaciones que reclamaban por la joven asesinada. Y, anteriormente,el luchador  Majidreza Rahnavard también fue condenado a muerte ahorcado en público en la ciudad santa de Mashad por las mismas acusaciones que Amir Nasr-Azadani, todo tras un juicio sin garantías.

Solo uno de los futbolistas iraníes que acudieron al Mundial de Qatar reaccionó ante las ejecuciones y las amenazas de ejecución, el arquero Alireza Beiranvand, que pidió en Instagram que las penas fuesen revocadas.

El resto, ¿harán algo?

¿ O seguirán jugando como si todo fuera una fiesta?


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